Buenos días amigos,

Hoy en el blog tengo el placer de entrevistar a Patricia Cardona, experta en prevención del abuso sexual infantil, autora del libro “Frases que nunca deberías decir ante un abuso sexual.

Si queréis ponerle cara podéis ver en el siguiente vídeo la entrevista que le hicieron en radio recientemente.

Cuéntanos Patricia, ¿por qué decidiste emprender este proyecto en defensa de la infancia dando visibilidad a un tema tan delicado?

La decisión de emprender este proyecto nació de la necesidad de dar sentido a los abusos sexuales que sufrí en la infancia y la adolescencia.
Tras los abusos, nadie de mi entorno se dio cuenta de lo que estaba ocurriendo, a pesar de que di muchas señales. Y cuando finalmente lo conté, me pidieron que no se lo dijera a nadie más.

Guardé silencio durante más de treinta años, movida por el miedo, la vergüenza y la culpa. Fue a los 43 años cuando ese silencio estalló; a los 45, se lo conté a mi familia. El dolor de reprocesar los recuerdos era tan intenso que, durante un tiempo, me resistí a aceptar que lo que me estaba ocurriendo no era una doble crueldad, sino una señal clara de que debía hacer algo con todo aquello.

Estudiaste ingeniería de telecomunicaciones, ¿qué te inspiró a dar el salto al vacío y adentrarte en este sector?

Estudié Ingeniería de Telecomunicaciones y trabajé durante veinte años en los sectores de telecomunicaciones, tecnología y banca.
Mi trabajo como jefa de proyectos me gustaba (con sus más y sus menos, como todo empleo por cuenta ajena), pero no me llenaba. Sentía que, de algún modo, estaba desperdiciando mi tiempo.

Fue entonces cuando comencé a recitar poemas sobre el abuso sexual infantil en pequeños teatros de los Países Bajos, donde vivía. Y allí me di cuenta del poder de las palabras. Tras cada lectura, se me acercaban sobre todo mujeres para confiarme algo que no le habían contado a nadie —muchas de ellas ni siquiera a sus propios padres—: sus abusos. Éramos completas desconocidas, pero ese dolor compartido nos unía, aunque solo fuera por unos instantes.

Después me formé y comencé a acompañar a personas adultas supervivientes, además de impartir talleres y cursos para familias con el fin de prevenir. Porque no hay nada que destruya más a un niño, una niña o un adolescente que un abuso sexual. Desgarra al menor y también a toda su familia. Y si yo podía hacer algo para evitar que otras familias vivieran lo que vivió la mía, lo haría.

En tus ponencias explicas que uno de cada cinco niños sufre abusos, y además uno de cada tres no se atreve a contarlo nunca. ¿Cuáles son las claves principales para evitar que este tipo de situaciones sigan sucediendo?

Para prevenir el abuso sexual infantil, lo primero es tomar conciencia de que le puede pasar a tu hijo o a tu hija.
Mientras sigamos creyendo que “eso les pasa a otras familias, en otros barrios, en otros coles”, no vamos a actuar. Y si pensamos que basta con leer un cuento y decirle a nuestro hijo que “su cuerpo es suyo”, tampoco será suficiente. La prevención real va mucho más allá.

El segundo paso fundamental es educar desde el respeto, como tú haces, Míriam: con buen trato, con presencia, con escucha. Sin esa base afectiva es muy difícil que un niño pueda identificar una situación abusiva y, aún más difícil, que se atreva a contarlo. Por eso, en mis formaciones insisto tanto en esta parte emocional: no solo enseñamos a prevenir, enseñamos a cuidar y a proteger de verdad.

Y, por último, la tercera clave: educación específica en prevención de abusos desde los 0 meses de vida. Para toda la familia. No solo para el peque. La necesitan también abuelos, tíos, monitores, canguros, profes, y cualquier adulto que forme parte del entorno. Porque cuando un niño ya ha tenido que decir “no”, muchas veces… ya hemos llegado tarde.

Nos cuesta hablar de temas relacionados con la sexualidad, ¿cómo podemos normalizar este tipo de conversaciones para luego educar en estos temas tan importantes y necesarios?

Gracias por esta pregunta, porque es una de las que más me hacen las familias.
Lo primero es reconocer que hablar de sexualidad nos incomoda… y aún así, hacerlo. Porque los beneficios que tiene para la protección y el bienestar de nuestros hijos son enormes.

Lo comparo muchas veces con ir al gimnasio: nos da pereza, hay ejercicios que nos parecen difíciles, pero los hacemos porque sabemos que luego nos sentiremos mejor, más fuertes y más ágiles. Pues con la educación afectivo-sexual ocurre lo mismo.

Empecemos por lo básico: llamar a las partes del cuerpo por su nombre, sin cambiar el tono de voz. Vulva, pene, igual que decimos codo o mano. Al principio cuesta, lo sé, pero romper ese tabú es un acto de empoderamiento para niños y adultos.

Después, hablemos de todas las emociones que sentimos cada día, no solo las “bonitas”: también la tristeza, la culpa, la rabia, la vergüenza, la curiosidad por el cuerpo y por el sexo… Porque si esas emociones no se nombran, se enquistan. Y los abusos se alimentan ahí, en lo no dicho.

Empieza aunque te incomode.
Habla con tus hijos sobre tu propia incomodidad. Nombra lo que antes se callaba. Normaliza hablar del cuerpo, de los límites, de las emociones. Enseña a decir “no” a lo que no quieren, y “sí” a lo que sí quieren. Y no al revés.

Eres una mujer muy creativa y haas creado también la obra de teatro “¿Te puedo dar un achuchón?”, ¿cómo llegaste a esta idea, ¿cuándo podremos verla y dónde?

Esta obra me llenó de amor.
Los niños venían corriendo a enseñarme los dibujos de sus camisetas, sus juguetes, me contaban cosas… y algunos se me agarraban de las piernas como si ya me conocieran. Fue un piloto que realicé en los colegios de Ses Salines y me encantó, de nuevo el poder del escenario, de las palabras.

La idea surgió de un cuento con el mismo título en inglés, y decidí adaptarlo al formato teatral. En la obra interpreto a siete personajes, cada uno con su propia voz, energía y movimiento. Es un formato de monólogo infantil que conecta muy bien con los peques y les transmite, a través del juego, ideas clave sobre el consentimiento, los abrazos, los límites y el respeto.

Ahora mismo estoy buscando una productora que me ayude a llevarla al siguiente nivel: mejorar el vestuario, el attrezzo, el decorado… y así poder moverla por más escuelas y teatros de Mallorca y de fuera.

Eres creadora del método L.A.B.O.R., ¿puedes contarnos un poco más?

Después de formarme con quienes considero referentes mundiales en la prevención del abuso sexual infantil, me di cuenta de que todas las formaciones se sustentaban en cinco pilares comunes. Y como ingeniera, sentí la necesidad de estructurarlo de forma sencilla y fácil de recordar.

Así nació el método L.A.B.O.R.:

🔸 L: Lenguaje y escucha
El lenguaje puede empoderar o desempoderar. En este primer módulo hablamos de las partes del cuerpo, de las emociones y de cómo crear un espacio seguro donde los niños se sientan escuchados sin juicios.

🔸 A: Apropiado o no apropiado
Aquí aprendemos qué es y qué no es abuso sexual, y los distintos tipos: desde los más encubiertos hasta los que implican contacto físico. Porque si no sabemos a qué nos enfrentamos, no podemos prevenirlo.

🔸 B: Barreras
Poner límites es un acto de amor hacia los demás y hacia uno mismo. En este módulo trabajamos cómo enseñar a nuestros hijos e hijas a decir “no” de forma clara y segura, y a proteger sus propios límites.

🔸 O: Organizar una red de ayuda con Otros adultos de confianza
Los niños se mueven en diferentes entornos, y en cada uno debe haber un adulto de confianza. Enseño cómo identificar esos adultos seguros basándonos en cuatro criterios clave. Por ejemplo: “si no respeta mis límites, y no me cree cuando le cuento algo no es una persona segura”. No quiere decir que sea un abusador, pero no es alguien en quien confiar a la hora de que tu hijo le cuente algo porque puede no creerle, no empatizar con él y decirle: “eso no ha sido nada, no es para tanto”

🔸 R: Reconocer y reportar
Hay más de 30 señales posibles de abuso. Aprender a reconocerlas y saber cómo hablar con un niño o adolescente cuando sospechamos algo puede evitar que el abuso continúe durante años.

El método se basa en el ejemplo, porque los niños aprenden imitando. Por eso todas las clases incluyen actividades prácticas para integrar en familia. No se trata de “añadir más tareas”, sino de incorporar nuevas conversaciones y hábitos protectores en la rutina diaria.

Formas parte del BREAVE Movement, ¿nos puedes explicar qué es?

Brave Movement es una organización internacional formada por personas supervivientes de abuso sexual infantil y por aliados comprometidos con nuestra causa. Luchamos por los derechos de las víctimas y trabajamos desde tres pilares fundamentales: prevención, sanación y justicia.

Nuestro lema es: “Sé valiente para que los niños y adolescentes puedan estar a salvo.”

Me uní al movimiento hace casi tres años y, desde entonces, he participado en varias campañas de incidencia política. He tenido la oportunidad de asesorar a miembros del Parlamento Europeo y del Congreso de los Diputados en España para impulsar leyes más firmes en protección a la infancia: endurecer las penas, aumentar los recursos para la sanación de víctimas y priorizar la prevención.

Yendo un poco más allá, hay una red internacional de ONGs que trabajan para la eliminación de la explotación sexual en el mundo, también en lo que se refiere a infancia, ¿nos puedes contar un poco más sobre el trabajo de ECPAT International y cómo colaboras con ellos?

ECPAT comenzó su andadura en 1990 y actualmente está presente en 115 países. Nació con el propósito de erradicar la explotación sexual infantil y es un referente mundial en esta materia.

Colabora con frecuencia con Brave Movement, y en estos momentos estamos trabajando juntas para lograr que se elimine la prescripción del delito de abuso sexual infantil en la Directiva Europea y que se refuercen las medidas de protección online a través del CSAR, un reglamento europeo que, lamentablemente, no está avanzando como debería.

ECPAT cuenta con expertos y recursos de gran valor, realiza análisis en profundidad sobre distintas realidades y propone soluciones concretas a gobiernos de todo el mundo, incluyendo la perspectiva de las víctimas y supervivientes. Me he formado con ellos, especialmente durante los Días de Acción relacionados con legislación europea y prevención en el sector turístico.

En España, muchas asociaciones forman parte de FAPMI, que a su vez es miembro de ECPAT.

Recientemente he sido nombrada experta independiente en la Red para la Prevención del Abuso Sexual Infantil de la Comisión Europea, donde volveré a coincidir con ECPAT. Nuestra próxima reunión tendrá lugar los días 12 y 13 de enero en Bruselas.

Muchísimas gracias por todo Patricia, un placer poder escuchar a personas como tú.

Patricia está colaborando en nuestro Bundle de Navidad y ofrecerá una Master Class en directo este domingo 21 de diciembre a las 18 hora peninsular española valorada en 200 €, en la que explicará las claves que debemos conocer para trabajar este tema en familia y como prevenir este tipo de situaciones en las próximas fiestas.

Si te interesa el tema y no puedes asistir en directo sólo tienes que reservar tu Bundle de Navidad y tendrás todos los detalles para acceder a la grabación de por vida.

¡Un abrazo y os leemos en comentarios!